Teatro unipersonal
De Cuentos y Poetas
Mi Pequeño Amado
(Una selección poética de Amado Nervo)
-Desde la Ventana
- Antonino
- La Fea
- El Gran Viaje
- Vieja Lllave
- Solidaridad
- La gota de agua que no quería perder su individualidad
- El Poeta Niño
- En Paz
Música:
Valses populares Mexicanos y obras de César Frank,
Ricardo Castro, Maurice Ravel y Claude Debussy
Se incluyen fragmentos del disco compacto Bleu del maestro Alberto Cruzprieto, piano
Intermedio
El Cumpleaños de la Infanta
de Oscar Wilde
óEl Ruiseñor y la Rosa
(Esta presentación podría ser con la narración de su elección de la autoría de O. Wilde)
La pista sonora incluye fragmentos de la obra instrumental de Schubert, Handel y Prokofiev.
El Pequeño Amado
El pequeño Amado nació en Tepic el 27 de agosto de 1870. Su padre se llamó Amado Nervo y su madre Juanita Ordaz. Su nana Juliana y su abuelita Cecilia le contaban fantásticos cuentos de países lejanos donde abundan tesoros, hadas y duendes. Su casa era pequeña pero tenía un gran patio con árboles tropicales y en un rincón se encontraba un pozo donde habitaba su amiga la tortuga a quien Amado alimentaba con cariño.
Tepic era una ciudad pequeña donde la catedral tenía una sola torre. En el centro de la plaza los niños correteaban en el pasto jugando a las alcanzadillas y a la "Gallina y el Coyote". El aroma de los naranjos en flor acompañaba sus juegos. Cuando un niño atrapaba a otro decía: "Tengo la luna sobre mi cabeza" y el otro le contestaba:"La tengo sobre la mía".
La tranquilidad del pueblo se interrumpía de vez en cuando con la llegada de Manuel Lozada y sus soldados. "¡Guarden las alhajas y las sedas en baúles que ahí viene Manuel Lozada, rápido llevemos todo a la iglesia que ahí estarán a salvo!"
A Amado le causaba curiosidad el regreso de las golondrinas, tanto como la llegada de los cirqueros a Tepic. Cuando el circo o convite llegaba a la ciudad , los niños iban por las calles. El payaso principal invitaba así a la comitiva "Chicos y grandes, vengan a presenciar las mil maravillas de los magos, la gracia y el encanto de las bailarinas, la destreza de los trapecistas ¡Vengan, acudan a una noche de magia y ensueño, pues ¡llegaron los cómicos!"
Fue entonces, en esos tiempos brillantes de su infancia, cuando nuestro pequeño Amado empezó a escribir versos.
¿Qué es esto? Le pregunto un día su hermana -
Son unos versos que inventé. -Contestó Amado.
¡Qué lindos están Amado!- replicó su hermanita- los leeremos esta noche en la cena.
Afortunadamente, el gusto por escribir lo heredó de su mamá quien también creaba versos, así que de ella hubo apoyo a su afición.
La feliz vida de los Nervo se ensombreció con la muerte de Don Amado en 1883, cuando nuestro amiguito tenía trece años. Su madre decidió entonces abandonar Tepic para educar a sus hijos en Michoacán. Al preparase para el viaje Amado escribe:
Vestido de casimir,
Y con zapatos de lona,
Mañana voy a partir,
Al Colegio de Jacona.
La obra de Amado Nervo llegó a ser muy amplia y hoy es para mí un privilegio compartir con ustedes una selección que surge de su pluma siempre inspirada y que con este libro, El pequeño Amado, se enriquece con el pincel fresco y delicioso de la infancia.